Una historia de corrupción

“Un enemigo del pueblo” es una obra del género de drama, publicada en 1882 y escrita por el dramaturgo noruego Henrik Ibsen. En 2018 se estrenó en Argentina una adaptación que contó con la participación de los actores Juan Leyrado, Raúl Rizzo, Viviana Puerta, Bruno Predicone y Romina Fernandes. Este espectáculo, que actualmente está disponible en la plataforma Teatrix, fue dirigido por Lisandro Fiks.

Esta pieza teatral cuenta la historia de las termas de un municipio no especificado, en el que el agua está contaminada, lo que representa un peligro para los bañistas. Entonces, cuando el intendente Pedro (Rizzo) se entera de esa noticia no quiere cerrar el complejo termal y hacer las reformas necesarias, por el costo que tendrían. Esto le genera un conflicto con Tomás (Leyrado), el médico del municipio, que además es su mismísimo hermano.

 

Las actuaciones, que van creciendo con el dramatismo de la obra, se sienten muy verosímiles. El que más se destaca es Juan Leyrado, que merecidamente por esta obra ganó el premio ACE a mejor actor. Se logra meter en la piel de un hombre honesto y preocupado por el bienestar de la población, aunque eso le genere problemas con su hermano. El punto cúlmine de su interpretación en las escenas finales, donde se logra transmitir al espectador los sentimientos de ese personaje.
Rizzo también tiene una gran actuación, encarnando de manera excelente a un gobernante sin escrúpulos, al que no le importa ocultarle información de gravedad a las personas.
 
La escenografía de la obra está muy bien hecha. Se logra recrear de forma realista el living de una casa y la modesta sala de redacción de un periódico.
Un recurso muy interesante que se utilizó en lo escenográfico, fue la utilización, en la escena de la congregación popular, del público presente en la sala como los habitantes del pueblo, rompiéndose de esa manera la cuarta pared. Además, en este fragmento de la obra, algunos de los actores se encuentran sentados entre los espectadores.
 
Estuvo muy bien realizada la adaptación, en la que se agregaron tintes de comedia y localismos de esta región, para que pareciera una historia hecha en Argentina. El encargado de esa tarea fue Lisandro Fiks, el mismo director, que también fue el realizador de la música que estuvo muy acorde con este espectáculo teatral.
 
Es una obra muy recomendable para ver, que deja múltiples enseñanzas, haciendo reflexionar sobre la importancia de tener un pensamiento propio y la necesidad de comprometerse políticamente. Si bien fue escrita hace poco más de 100 años, la temática sigue siendo muy actual, por la lucha contra los poderosos que solo buscan enriquecerse.
Nuestra opinión: muy buena.